Ivanova de los Reyes
Las antiguas casetas de policía construidas en la administración de Javier Gandara, para brindar seguridad a las familias que visitan el Parque Madero, siguen en abandono y hoy en día se han convertido en lienzo y baño público para expresar el arte urbano y hacer sus necesidades fisiológicas.
Son dos casetas las que se ubican al interior del parque una de ellas por el acceso de la avenida Morelia y la otra, por la calle Presbitero Pedro Villegas Ramírez, la cual se encuentra totalmente vandalizada con colores llamativos y dibujos en paredes al exterior e interior, donde también se observa basura y se expiden malos olores.
Los inmuebles no cuentan con puertas ni cristales, solo permanecen las rejas, ya que es lo único que no han logrado desprender los maleantes, y causan muy mala imagen la parque por tratarse de “casetas de policía”, las que se encuentran en esas condiciones.
En la actualidad el grafiti es considerado “arte urbano”, que sirve para expresar el sentir de las personas que se dedican a plasmar su “arte” en paredes o bardas de negocios y edificios públicos, pero para otros, es considerado simplemente vandalismo.
Las casetas rehabilitadas en 2016 por parte del Gobierno Municipal para ponerlas en operación con dos policías y cámaras de vigilancia, siguen en el olvido de las autoridades, y son un foco de infección para los visitantes al Parque Madero, porque son utilizadas como baños por los indigentes o como basurero.
