EDITORIAL

EDITORIAL

A las familias de Las Guásimas en Guaymas, no se les ha hecho justicia ni con el plan millonario de Andrés Manuel López Obrador a favor de comunidades yaquis.

Es el campo pesquero por excelencia de la etnia, viven en pobreza extrema, carecen de todo, desde centros de salud, escuelas dignas, servicios, vigilancia, hasta oportunidades de trabajo. Con el plan de justicia yaqui se les consideró para la construcción de plantas, pero los proyectos quedaron pendientes para el siguiente sexenio con Claudia Sheinbaum Pardo quien ya se comprometió a continuar con las acciones de apoyo a indígenas.

Ante la situación de crisis permanente resulta alentador el programa que impulsa el gobierno de Sonora para abatir una parte del rezago a través de subsidios y equipo como quedó demostrado en la reciente visita de Alfonso Durazo para confirmar que el poblado está en la agenda de autoridades estatales.

Después de décadas de abandono, como parte del Plan de justicia para el pueblo Yaqui, el gobernador ha llevado apoyos de manera integral para las más de 600 familias de esa comunidad, en esta ocasión fue acompañado del delegado de la Conapesca, Octavio Almada, con quien hizo entrega de 77 embarcaciones y 77 motores fuera de borda, que en su conjunto forman un binomio de artes para pescar.

Los trabajadores del mar, reconocieron como Durazo y el Gobierno federal han trabajado para abatir el rezago en el que se encuentran por deficiencias en servicios básicos y con pocas opciones para desarrollo.

Los apoyos son estímulo para el sector pesca, que es la primera actividad en Las Guásimas y con ello ayuda a que las familias puedan trabajar en el mar sin necesidad de financiamiento o entregando producto a cuenta de préstamos.

Falta todavía que se cumplan los compromisos de construir un centro de salud y una planta para procesos de mariscos como lo considera el famoso plan de justicia que supone inversión de 14 mil millones de pesos y falta restituir una cantidad de pendientes en obras para que puedan salir de la marginación, aun así, con los apoyos en artes de pesca al menos el gobierno demuestra que no se ha olvidado del campo pesquero en el que se va a trabajar para que las nuevas generaciones puedan acceder a mejor calidad de vida y progreso.

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