En medio de una celebración local en el municipio de San Marcos, Guerrero, la violencia volvió a irrumpir: un hombre fue asesinado la noche del 19 de abril durante una carrera de caballos que formaba parte del Festival del Caldo, realizado en la comunidad de Tecomate Pesquerías. “Se reportó una agresión armada que culminó en la muerte de un hombre tras varios disparos de arma de grueso calibre”, informaron medios locales.
El ataque ocurrió alrededor de las 21:18 horas, sobre la calle principal de la región conocida como Costa Chica. Inicialmente, la llamada al 911 fue registrada como un posible atentado contra la diputada local Gladys Cortés Genchi, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Sin embargo, la propia legisladora desmintió dicha versión horas después a través de una publicación en redes sociales, donde escribió: “Agradezco las muestras de preocupación. Yo estoy bien, estoy con mi familia“.
La víctima del ataque fue identificada como Jared Cortés Moztecuma, sobrino de la diputada. Su padre, Arturo Cortés Genchi, trasladó el cuerpo en una camioneta particular a una funeraria en San Marcos y pidió expresamente que la Fiscalía General del Estado y la Policía Investigadora Ministerial se abstuvieran de intervenir.
Tras los hechos, autoridades federales, estatales y ministeriales desplegaron un operativo en la zona para iniciar las diligencias correspondientes. A pesar del clima festivo, la comunidad quedó marcada por el acto violento, enmarcado dentro de una serie de asesinatos recientes en la entidad.
De acuerdo con información de Quadratín Guerrero, abril ha sido un mes particularmente sangriento en el estado, sumando al menos cuatro homicidios ligados al sector ganadero. Entre las víctimas se encuentran Sandra Marín, reconocida ganadera y ex presidenta del DIF en Azoyú; Constanciao Hernández Villanueva, líder ganadero de San Marcos; y Bulfrano Barragán Carmona, presidente de la Asociación Ganadera de Azoyú.
El crimen más reciente tuvo lugar también el 19 de abril, cuando sujetos armados irrumpieron en una vivienda cercana a la central de autobuses, sobre la calle Ignacio Zaragoza, donde ejecutaron al ganadero identificado como Armando N.
Las autoridades aún no han confirmado si existe una conexión entre estos hechos o si forman parte de un patrón sistemático de violencia en contra del sector ganadero y figuras políticas en la región.