Los neoyorquinos remontaron una desventaja para imponerse 106 a 100 y poner la serie 2-1
Agencias
Los jugadores de Knicks de Nueva York vinieron de atrás para rescatar una victoria vital ante los Pacers de Indiana con marcador de 106-100 y poner la Final de la Conferencia del Este 2-1.
Karl-Anthony Towns y Jalen Brunson fueron las claves para regresar de un déficit de hasta 20 puntos en el Bankers Life Fieldhouse.
Durante el primer cuarto, Indiana comenzó con la ventaja y gran parte fue gracias a su banquillo, los cuatro reservas de los Pacers anotaron un combinado de 13 puntos con lo que imponían el ritmo temprano en el juego y firmar un 30-26 en el parcial.
Los Knicks se vieron en un agujero al final de la primera mitad, aun así, pudieron conseguir una racha de 8-2 en los dos últimos minutos de la primera parte para reducir su desventaja. Todo fue gracias a un triple de Mikal Bridges a falta de cinco segundos que al final ayudó al menos a que los Knicks se marcharan a los vestuarios con algo de impulso.
Nueva York había ido por delante al descanso en los partidos 1 y 2, pero como todos saben, los Knicks terminaron en el lado equivocado de las cosas al final. Esta ocasión las cosas se habrían de invertir y ahora en casa de los Pacers.
Anthony Towns fue pieza clave para ayudar a los Knicks a descontar una desventaja de 20 puntos que los Pacers llegaron a tener con dos grandes tiros, un triple y luego un tiro de falta para dar a Nueva York una ventaja. Los Pacers respondieron para recuperar la ventaja, pero el moméntum de los Knicks era ya mucho.