Alejandro Kirk, Andrés Muñoz, el hermosillense Isaac Paredes y Jonathan Aranda, están entre los más destacados
Agencias
El receptor Alejandro Kirk, el cerrador Andrés Muñoz, el tercera base Isaac Paredes y el primera base Jonathan Aranda pusieron en alto el nombre de México en las Grandes Ligas en 2025, pero fue el tijuanense Kirk quien se llevó los máximos honores al dejar huella con una postemporada histórica.
Kirk, Muñoz, Paredes y Aranda hicieron historia a mitad de temporada, cuando establecieron una marca para mexicanos al ser seleccionados al Juego de Estrellas, pulverizando el récord de dos llamados al mismo partido.
Aunque Paredes declinó asistir, Kirk, Muñoz y Aranda hicieron historia al jugar los tres para la Liga Americana. Kirk y Aranda pegaron imparables cada uno. Muñoz lanzó dos tercios con una base y un ponche, manteniendo la efectividad de mexicanos en 0.00 en la historia del Juego de Estrellas.
Aranda tuvo la oportunidad de hacer historia al ser uno de los tres jugadores de la Liga Americana en el decisivo Derby de Jonrones que definió el Juego de Estrellas, pero falló en los tres intentos.
El cátcher de los Azulejos de Toronto escribió páginas de oro en la postemporada, al establecer marcas para mexicanos, la principal de ellas al convertirse en el primer nacido en México en conectar cuadrangular en una Serie Mundial.
Kirk se dio vuelo en la postemporada al disparar 18 imparables, par de dobles, cinco jonrones, anotar 11 carreras, producir 13 y recibir 9 bases por bolas, para un AVE de .254, pero .369 en OBP y .846 en OPS.
Kirk ahora es el líder de por vida entre los mexicanos en postemporada con 24 hits, tres dobles, cinco jonrones (igualado con Vinny Castilla), 13 producidas, 13 anotadas, bases por bolas con 11 y ponches con 15.
Lo hizo casi todo en la postemporada, pero quedó para la posteridad en el video del título de Dodgers de Los Ángeles al ser el último out de la Serie Mundial, en un turno en que hubiera cambiado todos sus récords por el batazo que hubiera cambiado la historia.
El cerrador Muñoz, de los Marineros de Seattle, se convirtió en el tercer pitcher nacido en México en salvar un mínimo de 30 partidos en una temporada, y en la postemporada hizo historia al acreditarse dos más.
El sinaloense terminó la campaña con 39 rescates, para unirse a Joakim Soria y Roberto Osuna en los únicos mexicanos con un mínimo de tres decenas.
En los playoffs salvó par de partidos en par de oportunidades, al verse hermético en 8.1 entradas en siete partidos en que aisló dos imparables, regaló par de pasaportes y ponchó a cinco.
En el rol regular su efectividad fue de 1.73 en 64 relevos en que compiló 62.1 entradas, con apenas 36 hits admitidos, 28 bases por bolas y 83 ponches, para un WHIP de 1.03.
En su último relevo de la temporada el 27 de septiembre entró con una efectividad de 1.47 y toleró par de carreras limpias en un episodio para elevarla a 1.73 y perder la oportunidad de registrar la mejor ERA en una campaña para un relevo mexicano en MLB en todos los tiempos.
Paredes y Aranda lideraban a sus equipos a la ofensiva, el primero en jonrones y remolcadas con los Astros de Houston y el segundo en porcentaje de bateo con los Rays de Tampa Bay, pero las lesiones aparecieron y les hicieron perder dos meses de temporada a cada uno.
Paredes, regresó el 19 de septiembre, quedó con números de 20 jonrones y 53 producidas, un jonrón y tres remolcadas más de las que tenía cuando se lesionó el 19 de julio.
Aranda, volvió el 26 de septiembre, terminó con .316 de promedio de bateo, mismo promedio que tenía el 31 de julio cuando se lesionó siendo el tercer mejor bate de la Liga Americana solo detrás de Aaron Judge (.342) y Jeremy Pena (.322).

