El menor de ocho años de edad se debate entre la vida y la muerte luego de ser embestido por el vehículo cuyas características se ignoran
MANUEL RÁBAGO P
Debatiéndose entre la vida y la muerte se encuentra un menor de edad, luego de haber sufrido serias lesiones al ser atropellado por un automóvil “fantasma”, mientras se encontraba en una de las calles de la comunidad Graciano Sánchez, en la zona rural del municipio de Guaymas.
El niño de ocho años fue identificado con el nombre de José David, quien resultó con traumático craneoencefálico severo, neumotórax, fractura en tibia y peroné, además de golpes en diferentes partes del cuerpo.
Paramédicos de Cruz Roja Mexicana delegación Empalme, lo encontraron a bordo de un automóvil sobre la carretera estatal 85 a la altura de la población de “San Fernando”, inconsciente, por lo que de inmediato fue trasbordado a la ambulancia, trasladándolo de urgencia al hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) del municipio rielero.
Ahí fue recibido por el personal médico en turno, debido a la gravedad fue intubado y estabilizado y posteriormente al confirmar que no contaba con afiliación al IMSS, el menor de edad fue llevado al hospital IMSS Bienestar de Guaymas, donde es reportado grave.
En el Departamento de Tránsito Municipal informaron que el accidente donde el menor fue atropellado por un auto “fantasma” cuyo conductor o conductora salió huyendo, se registró alrededor de las 08:00 horas del martes, mientras el niño se encontraba en una de las calles del ejido “Graciano Sánchez”.
Uno de los vecinos testigo del percance dio aviso a la mamá del pequeño, María Magdalena, quien se dirigía a su trabajo a un campo agrícola en la zona rural de Guaymas.
De inmediato, el niño recibió el apoyo de un automovilista que decidió trasladarlo para encontrar a los socorristas de Cruz Roja Mexicana de Empalme, quienes ya habían activado el Servicio Médico de Urgencia (SMU) y lo alcanzaron en el ejido San Fernando.
Elementos de Tránsito Municipal elaboraron el Informe Policial Homologado (IPH), que fue turnado a la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común, donde oficiales de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), encabezan las indagatorias para dar con la ubicación del vehículo y quien lo conducía.