Con una recaudación aproximada de 345 millones de dólares en la venta internacional de entradas hasta el pasado domingo, la tercera entrega de la saga épica de ciencia ficción dirigida por James Cameron cumplió con las proyecciones financieras de Walt Disney. Esta nueva producción, titulada “Avatar: Fire and Ash”, se ha consolidado como el segundo estreno más lucrativo de Hollywood durante el presente año 2025, posicionándose únicamente por detrás de los 556 millones de dólares obtenidos por “Zootopia 2” el pasado noviembre.
En los mercados de Estados Unidos y Canadá, la cinta lideró las listas de popularidad al ingresar 88 millones de dólares, cifra que representa una parte significativa de su acumulado mundial. La historia profundiza en las vivencias de los habitantes de Pandora, los Na’vi, seres de piel azul y casi tres metros de altura. No obstante, el rendimiento en la taquilla doméstica mostró un descenso del 35% en comparación con la secuela de 2022, un fenómeno que los analistas atribuyen a la menor distancia temporal entre estrenos.
Jeff Bock, especialista de Exhibitor Relations Co., explicó que, a diferencia del regreso esperado tras trece años de ausencia, con esta entrega “el público no la echó tanto de menos como con la secuela”. Sin embargo, el experto matizó que los resultados actuales representan “un gran comienzo para el periodo festivo”, anticipando que la afluencia de espectadores aumentará drásticamente durante las celebraciones de Navidad y Año Nuevo, lo que provocará “una gran avalancha de taquilla durante los próximos dos o tres fines de semana”.
Las salas de cine ven en este estreno una oportunidad para revitalizar un sector que, si bien supera en un 1.3% los ingresos de 2024, aún se encuentra un 22.5% por debajo de las cifras récord prepandémicas de 2019. Las expectativas de crecimiento se extienden hacia 2026, año que promete lanzamientos de gran calibre como “Dune: Parte Tres”, “Avengers: Doomsday”, un proyecto inédito de Christopher Nolan y la llegada de “The Mandalorian and Grogu” a la pantalla grande.
El éxito comercial de las producciones de Cameron, donde Zoe Saldaña y Sam Worthington interpretan a padres luchando por su familia y su mundo, suele caracterizarse por una resistencia prolongada en cartelera. La franquicia, cuyas dos primeras partes sumaron 2,900 y 2,300 millones de dólares respectivamente, requiere de beneficios masivos debido a sus elevados costos de producción. Mientras tanto, la hoja de ruta de Disney ya tiene programadas la cuarta y quinta película para los años 2029 y 2031.