Crece la polémica en torno a Chingu Amiga tras rumores sobre su posible salida de México

Crece la polémica en torno a Chingu Amiga tras rumores sobre su posible salida de México

Sujin Kim, conocida en redes sociales como Chingu Amiga, ha estado envuelta en una creciente controversia que ha puesto en duda su permanencia en México. Los rumores de que la influencer surcoreana abandonaría el país debido a la oleada de críticas que ha enfrentado en plataformas digitales han cobrado fuerza en los últimos días, aunque no existen pruebas concretas que respalden esa versión.

La especulación sobre su presunta decisión de mudarse a Perú surgió a raíz de publicaciones en redes que aseguraban que Kim, cansada de los comentarios negativos, había optado por dejar el país. No obstante, hasta el momento, la creadora de contenido no ha confirmado dicha información ni ha emitido declaraciones al respecto. Tampoco se han presentado videos, audios o imágenes que validen esa supuesta decisión.

La polémica que rodea a Chingu Amiga no es nueva, pero ha tomado mayor intensidad desde que publicó un video el pasado 2 de marzo titulado “La deportaron de EE.UU. y la dejaron sin nada en México, fui a ayudarla”, en colaboración con el youtuber Huarache Oaxaqueño. En dicho material, ambos ofrecieron ayuda a Erika, una madre deportada de Estados Unidos. Aunque la acción fue bien recibida por algunos, otros la acusaron de aprovecharse de una situación vulnerable para generar contenido viral.

A estas críticas se suman señalamientos por contribuir a la gentrificación de algunas zonas del país, especialmente después de una campaña publicitaria en el Metro de la Ciudad de México, donde expresó que “moría por vivir en Latinoamérica”. Para diversos usuarios, este tipo de declaraciones resultan insensibles frente a la realidad socioeconómica que vive gran parte de la población.

La grafóloga Marifer Centeno incluso reveló públicamente que intentaron pagarle para emitir comentarios negativos sobre la influencer, lo cual sugiere que podría existir una campaña orquestada de desprestigio en su contra, aunque esta versión tampoco ha sido confirmada.

El caso ha generado un amplio debate sobre el rol de los influencers extranjeros en México, el privilegio con el que a menudo son percibidos y el impacto social que tienen sus acciones. Mientras unos cuestionan la autenticidad de su compromiso con el país, otros la respaldan y aplauden su esfuerzo por adaptarse y promover la cultura mexicana.

La figura de Chingu Amiga continúa dividiendo opiniones, reflejando la creciente tensión entre el fenómeno de los creadores de contenido internacionales y los desafíos sociales que enfrentan las comunidades locales.

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