Pasaron 25 años desde que ganó el Premio Estatal del Deporte y aspiró a ser entronizada
Redacción Entorno Informativo
Desde que María del Carmen Valenzuela recibió el Premio Estatal del Deporte en la modalidad de entrenadora, en el año 2000, visualizó que uno de sus sueños futuros sería ingresar al Salón de la Fama del Deportista Sonorense.
Ahora, 25 años después, el anhelo se hizo realidad, después de ser entronizada al recinto de inmortales dentro de la Clase 2025 por los grandes logros obtenidos como estratega de gimnasia artística femenil, disciplina que practicó desde muy pequeña para jamás dejarla de lado, al contrario, la hizo parte de su vida.
De hecho, María del Carmen es la séptima figura, pero primera entrenadora, en recibir el Premio Estatal del Deporte y posteriormente entrar al Salón de la Fama del Deportista Sonorense, uniéndose a grandes celebridades sonorenses: Juan Pedro Toledo (1994 y 2011), Ana Gabriela Guevara (1996 y 2011), Edgardo Lucero (2000 y 2016), Luz Mercedes Acosta (2003 y 2020), Luis Alberto Zepeda (2004-2016 y 2023) y Óscar Valdez (2008 y 2019).
“Ese año 2000 me percaté que, al mismo tiempo de entregarse el Premio Estatal del Deporte, eran entronizados los nuevos inmortales del Salón de la Fama del Deportista Sonorense, desde ese momento, siempre soñé en entrar al recinto. La verdad me dio mucha nostalgia el hacerlo al lado de mi hermano César en la misma entronización, porque recordé mucho a nuestro papá, que ya falleció… él nos inculcó el deporte y siempre estuvo apoyándonos en todo momento”, agregó.
“(Tras el homenaje) Me vienen a la mente todas las competencias a lo largo de los años, pero sin duda la máxima son los Juegos Olímpicos (estuvo en París 2024), asistir a ese evento es único, una fiesta, algo increíble, pero también recordé los Panamericanos y Centroamericanos”, destacó.
El recibir la distinción, dijo, es una motivación extra, porque así continuará con ahínco el trabajo de entrenadora, sobre todo en la enseñanza a las nuevas generaciones de niñas que son el futuro de la gimnasia sonorense, lo cual no cambiaría por nada, sobre todo por momentos sumamente gratificantes como ver la sonrisa de las pequeñas al momento de aprender rutinas y ejercicios.
Sin embargo, el ser entrenadora de alto rendimiento no siempre es miel sobre hojuelas, un ejemplo, señaló, fue que durante el proceso olímpico rumbo a París 2024 estuvo ocho meses lejos de casa y de su familia, en concentraciones y eventos internacionales al lado de la bajacaliforniana Alexa Moreno, con quien colaboró en los Juegos Olímpicos.

