El presidente municipal, Antonio Astiazarán, recibió a familiares y amigos del exalcalde quien gobernó Hermosillo de 1982 a 1985, de quien reconoció su vocación por servir
Ivanova de los Reyes
Familiares, amigos cercanos y autoridades municipales, rindieron este miércoles guardia de honor en Palacio Municipal a Casimiro Navarro Valenzuela expresidente municipal de Hermosillo durante el periodo de 1982 a 1985.
El Presidente Municipal, Antonio Astiazarán Gutiérrez, los exalcaldes Alejandro López Caballero, María Dolores del Río, Gastón González Guerra, Guatimoc Yberri González, Francisco Búrquez Valenzuela y el secretario del Ayuntamiento, Eduardo Alejo Acuña Padilla encabezaron la guardia de honor.
Toño Astiazarán recibió a la señora Magdalena Figueroa de Navarro y sus hijos María del Carmen, Juan Francisco, Luis Ignacio y Casimiro Tercero, Navarro Figueroa, durante el homenaje de cuerpo presente en el que Casimiro Navarro fue recordado como un hombre que luchó por ejercer su vocación de servir a su comunidad, a pesar de las grandes adversidades que eso implicaba en la época en que gobernó la capital sonorense.
“Dicen que en la adversidad es donde salen a relucir los talentos, en la comunidad regularmente permanecen dormidos, es así como Casimiro Navarro nos dio a conocer sus talentos, en la adversidad de haber sido el segundo presidente municipal de oposición en tiempos donde serlo era una vocación de alto riesgo, pero eso nunca iba a detener a quien desde joven fue educado para luchar por sus convicciones, por sus valores y principios que lo acompañaron de principio a fin”, manifestó Astiazarán Gutiérrez.
“Le tocó vivir tiempos de resistencia civil, tiempos en que la comunidad se topaba con muros de autoridad, que sólo el coraje y determinación de alguien como Casimiro de salir adelante podía implementar”, continuó.
Destacó que Navarro Valenzuela fue de los primeros presidentes municipales de Hermosillo realmente ciudadano, quien sacó adelante a su familia a base de esfuerzo y un arduo trabajo, y será recordado no solo por su carrera política, sino por sus valores humanos y gran determinación.
“La vocación por servir a los demás, por servir a Hermosillo era 100 por ciento una vocación ciudadana que sólo podía surgir de quien, más que ambicionar el poder, ambicionaba servir a su comunidad, a su municipio, a las y los hermosillenses, y lo hizo, no solo enfrentando adversidades, sino, además, enfrentando circunstancias que en ocasiones incluso pusieron en riesgo su propia integridad, subrayó.
Con su partida, nos está dejando a todos, su gran legado, un legado de lucha, coraje, determinación y, sobre todo, de servicio a los demás, puntualizó.
El exalcalde y empresario hermosillense, también fue desempeñó como presidente del Comité Municipal del PAN Hermosillo durante el periodo de 1980 a 1981 y 1989 a 1990.
Fue Consejero Estatal del PAN Sonora de 1982 a 1986 y, Consejero Nacional del PAN de 1985 a 1986.
También fue titular del Instituto Sonorense del Deporte y la Juventud (Isodej), de 1994 a 1996; posteriormente, se retiró de la vida pública para hacerse cargo de una tienda de artículos deportivos.
El jardín del Palacio Municipal se llenó de personas que acudieron a despedir a “El Cani”, como se le conoció en su época juvenil en la colonia El Ranchito. Lo hicieron entre aplausos y remembranzas de su paso por la vida pública, personal y como empresario.
