Con el fin de fortalecer la seguridad, frenar el tráfico de fentanilo y disuadir la migración ilegal, este martes comenzó el despliegue de 10 mil elementos de la Guardia Nacional (GN) hacia la frontera norte, como parte de los acuerdos entre los gobiernos de México y Estados Unidos para evitar conflictos comerciales entre ambas naciones.
El jueves, la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano pusieron en marcha un operativo conjunto en la frontera de Ciudad Juárez, Chihuahua, en cumplimiento con lo acordado entre el presidente estadounidense Donald Trump y su homóloga mexicana, Claudia Sheinbaum.
Según la agencia EFE, durante los patrullajes realizados, los elementos federales confiscaron más de 30 escaleras y sogas, presuntamente utilizadas por traficantes de personas, conocidos como “polleros”, para facilitar el cruce ilegal de migrantes a Estados Unidos. Para esta misión, las unidades desplegadas cuentan con vehículos militares, efectivos motorizados y equipos de vigilancia con drones que permiten detectar intentos de cruce y desmantelar redes de tráfico humano.
A pesar del despliegue, el gobierno mexicano aún no ha proporcionado cifras oficiales sobre detenciones o aseguramientos adicionales derivados de estas operaciones en la frontera con Estados Unidos.