Las dirigidas por Pedro López batallaron, pero terminaron igualando a un gol
Agencias
En un partido cerrado, con escasas pero vibrantes oportunidades, México empató 1-1 ante Panamá en el segundo duelo amistoso de esta ventana internacional. Las dirigidas por el estratega Pedro López batallaron frente al conjunto panameño en el Estadio Carlos Iturralde de Mérida, Yucatán.
Los primeros diez minutos fueron de claro dominio mexicano, sin embargo, el equipo no logró concretar las varias oportunidades frente a la portería rival.
La banda izquierda, con Scarlett Camberos como protagonista, se consolidó como la principal vía de llegada para el Tricolor. Las panameñas no tuvieron más opción que rechazar los constantes embates, replegando sus líneas y, en ocasiones, colocando hasta seis jugadoras en su último sector.
México fue cauteloso y no le regaló espacios a Panamá, pero las rivales aprovecharon una desatención de Rebeca Bernal para que Marta Cox conectara con Sherline King. Esta última soltó un zapatazo que se estrelló en la base del poste de la portería de Celeste Espino, lo que representó la primera advertencia para las mexicanas.
La presión asfixiante que ejerció México en los primeros minutos desapareció tras un tiro libre de Panamá, que les dio confianza a las rivales para equilibrar la balanza, aunque solo por un par de minutos.
Un servicio en profundidad de Rebeca Bernal para Jasmine Casarez, seguido de una diagonal retrasada para Nicole Pérez, culminó en un festejo de gol para la Selección Mexicana. El ataque a velocidad, la mejor arma de las pupilas de Pedro López, por fin dio frutos.
La alegría duró poco para el Tri. Una falta fuera del área le dio a Marta Cox la oportunidad de cobrar un tiro libre magistral. El balón rozó el poste izquierdo de la portería mexicana antes de incrustarse al fondo de la red, dejando el marcador empatado.
México pudo haberse ido al descanso con ventaja, pero Christina Burkenroad desaprovechó una clara oportunidad frente al arco, aprovechando la lesión de la portera panameña Yenith Bailey.
Las emociones fueron pocas, aunque puntuales, en el segundo tiempo. Pedro López optó por mantener a las mismas once jugadoras que iniciaron el partido, mientras que Panamá replicó la fórmula.
El juego se interrumpió brevemente por un fuerte encontronazo de Carina Baltrip en el área, que, afortunadamente para Panamá, no pasó a mayores. Este incidente marcó el tono del segundo tiempo: pausado, cauteloso, y con momentos de estudio entre ambos equipos.
Los gritos desde la tribuna se hicieron más intensos con el ingreso de Katty Martínez, quien, en su primer acercamiento con el balón, estuvo a punto de marcar el segundo tanto para México.
El protagonismo cambió de bando cuando la portera Bailey sufrió una dura entrada en el área, aunque de manera algo exagerada.
México desaprovechó las oportunidades en el segundo tiempo, especialmente con algunas modificaciones que no funcionaron en el campo. El final del encuentro llegó acompañado de una baja importante en la intensidad del equipo mexicano, dejando la sensación de que pudo haber conseguido un resultado favorable ante un Panamá que, aunque fue un buen sinodal, se limitó a esperar una nueva genialidad individual.