Este 17 de junio, tras cumplirse 180 días de su promulgación, entró en vigor la llamada Ley Silla, una reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) que reconoce el derecho al descanso durante la jornada laboral.
Con esta reforma, los empleadores están obligados a proporcionar a sus trabajadores asientos con respaldo para que puedan tomar pausas durante su jornada. Además, queda prohibido que las empresas exijan a los empleados permanecer de pie durante todo el turno.
El propósito de la Ley Silla es prevenir los riesgos para la salud derivados de la exposición prolongada a posturas verticales, buscando mejorar las condiciones laborales y el bienestar de los trabajadores.