Luego de una maratónica audiencia de más de 15 horas en las salas de juicios orales del penal de Pacho Viejo, en Coatepec, el juez Antonio Zarur Ahumada dictaminó la madrugada del jueves la vinculación a proceso del exfiscal Jorge Winckler Ortiz. Asimismo, le fue impuesta la medida cautelar de prisión preventiva justificada por un periodo de un año.
La determinación judicial se basa en la investigación de la Fiscalía General del Estado, a través de la Fiscalía de Investigaciones Ministeriales, que lo señala como presunto responsable del delito de tortura en agravio de un individuo identificado con las iniciales G.A.G. Dentro del proceso penal 115/2025, el Juez de Proceso y Procedimiento Penal Oral del Distrito Judicial de Xalapa ratificó la medida cautelar impuesta al exfuncionario.
Jorge Reyes Peralta, abogado del exdirector de servicios periciales, Gilberto Aguirre Garza, quien se presenta como víctima de tortura con música de reguetón a alto volumen, especialmente de Maluma, declaró que Winckler permanecerá en el penal de Pacho Viejo mientras la Dirección de Readaptación Social del estado de Veracruz decide su centro de reclusión definitivo. Cabe destacar que Winckler también enfrenta otra investigación por el mismo delito, lo que previamente derivó en la imposición de prisión domiciliaria.
Además de Aguirre Garza, Francisco Zárate Ávila, quien fungía como escolta del exfiscal de Javier Duarte, Luis Ángel Bravo Contreras, también habría sido víctima de tortura por parte de Winckler. Según los alegatos presentados, los interrogatorios se realizaban en horas de la madrugada y eran precedidos por la reproducción de música a volumen elevado dentro del penal de Pacho Viejo.
Previo a la audiencia, Reyes Peralta había insinuado la posibilidad de un acuerdo entre el exfiscal, el exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares y la presidenta del Poder Judicial, Lizbeth Jiménez, que podría haber derivado en su liberación. No obstante, tras el fallo judicial, el abogado afirmó: “Se impuso la justicia”.
De ser declarado culpable, Jorge Winckler podría enfrentar una pena de hasta 20 años de prisión, aunque su defensa todavía tiene la posibilidad de apelar la resolución. Su abogado, Luis Enrique González Lira, expresó su inconformidad con el proceso, argumentando que se había favorecido a la Fiscalía y que sus solicitudes previas, incluidas tres incidencias por presuntas violaciones a derechos humanos, fueron desestimadas.
González Lira también alegó que se está violando el principio de prohibición de doble enjuiciamiento, ya que una determinación previa había declarado que no había elementos para ejercer acción penal. Sin embargo, el juez consideró infundados estos argumentos y sostuvo que la jurisprudencia permite la continuidad del proceso. Ante esta situación, la defensa anunció que buscará impugnar la decisión a nivel federal.
El primer caso de tortura atribuido a Winckler fue sobreseído tras una serie de pruebas periciales y testimonios que desacreditaban la versión de la víctima. No obstante, en esta nueva audiencia, dicha resolución no fue considerada. En consecuencia, la defensa del exfiscal enfatizó su confianza en que las instancias judiciales federales reconsideren el caso y reviertan el fallo en su contra.
