La primera aparición pública del abogado mixteco Hugo Aguilar Ortiz, tras recibir su constancia de mayoría como próximo presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ocurrió entre música, danza y orgullo comunitario en un edificio del Centro Histórico de la Ciudad de México, donde el Movimiento Unificador de Lucha Triqui (MULT) tiene su sede. El inmueble, usado como bodega y asamblea de comerciantes triquis, fue el escenario del fandango con pueblos indígenas y afromexicanos, al que llegó el ministro electo con retraso debido a demoras del INE, la distancia y la lluvia, aunque esto no mermó el entusiasmo de sus anfitriones.
Recibido con incienso, flores y vítores como “¡Sí se pudo!” y “¡Hugo, escucha, el pueblo está en tu lucha!”, Aguilar Ortiz expresó: “Yo quiero ofrecerles el cargo de presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a todos y a todas ustedes, lo voy a seguir repitiendo, no llego yo, llegamos todos los pueblos indígenas y afroamericanos”. Desde el auditorio del MULT, al ritmo de tamboras y bajo la mirada de más de 200 asistentes, reiteró su compromiso con las comunidades: “Nosotros salimos del pueblo, pero el pueblo no ha salido de nosotros”.
Quienes lo acompañaron destacaron su trayectoria y cercanía con las causas indígenas, como recordó Fausto de Jesús González del MPCOI. Entre los asistentes también estuvo Yaretzi Donají Bautista, reina de la fiesta patronal 2024-2025 de San Agustín Tlacotepec, quien celebró que “alguien de nuestro pueblo haya llegado tan lejos”. La noche transcurrió entre música de la Banda Regional Auténticos de Jesús y la Orquesta La Juntepec, con el orgullo colectivo de una comunidad que ahora se siente representada en uno de los más altos cargos del Poder Judicial de la Federación.