El glamour del Carnaval de Río de Janeiro no solo atrae a las modelos brasileñas más icónicas, como Gisele Bündchen, Adriana Lima o Alessandra Ambrosio, sino también a estrellas internacionales que desean vivir en carne propia la vibrante energía de la celebración. Este año, fue el turno de Irina Shayk, quien el pasado 3 de marzo hizo su primera aparición en esta icónica festividad, sumergiéndose por completo en la cultura local con un espectacular atuendo de pedrería.

A pesar de haber visitado Brasil en diversas ocasiones por trabajo y placer, la supermodelo rusa nunca había participado en el carnaval hasta ahora. En esta edición, fue invitada de honor de la prestigiosa escuela de samba Beija-Flor de Nilópolis, una de las más aclamadas del evento. Ante tal oportunidad, Shayk no dudó en aceptar la propuesta y desfilar en el Sambódromo Marquês de Sapucaí, que puede albergar a más de 75.000 espectadores.
“Es la pasarela más emocionante en la que he desfilado. Estamos aquí para celebrar la cultura, el amor y la unidad. Soy muy bienvenida en Brasil. Me siento como en casa aquí. Besos, Brasil”, expresó la modelo ante un reportero de la cadena más importante del país, justo antes de iniciar el desfile.
El atuendo de las bailarinas de samba, aunque suele constar de pocas piezas, se distingue por su riqueza en detalles y adornos extravagantes. Para su debut en el carnaval, Shayk confió en el reconocido estilista Henry Filho, quien diseñó para ella un conjunto de pedrería azul con la filosofía del “más es más”, reflejando a la perfección el espíritu festivo de la ciudad carioca.

Con su deslumbrante presencia, Irina Shayk dejó claro que la magia del Carnaval de Río sigue conquistando a figuras de todo el mundo, quienes no dudan en rendirse ante el esplendor de esta celebración única.