El hermosillense está ansioso de regresar al diamante, pero esperará la evaluación de su lesión por los especialistas y se desconoce si alcanzará a regresar este año
Agencias
El regreso de Isaac Paredes a un diamante todavía está lejos de concretarse, pero el simple hecho de verlo fildear rodados en tercera base provocó una pequeña celebración en el vestuario de los Astros. El mexicano, elegido All-Star en esta temporada antes de su lesión, volvió a realizar este miércoles actividades de beisbol luego de casi un mes detenido por el problema en el tendón de la corva derecha.
Antes del playball del segundo encuentro contra Yanquis, Paredes inició en un terreno desconocido, tomando algunos lanzamientos en segunda base bajo la supervisión del coach Tony Perezchica, para después moverse a su zona natural de tercera.
Ninguno de los batazos exigió demasiado, pero la sola imagen de su guante en acción bastó para inyectar ánimo a Houston.
Hoy fue un día realmente bueno para Paredes y para nosotros como equipo”, resumió el mánager Joe Espada, consciente de que el panorama aún es incierto.
No sabemos si volveremos esta temporada. Elegí la rehabilitación porque las opiniones de los médicos eran diversas. Quise darme la oportunidad de volver este año. Ahora mismo no lo sabemos”.
El calendario es cruel: restan apenas 23 partidos y 26 días de temporada regular. Cualquier avance, por mínimo que sea, tiene que leerse como esperanza.
Paredes ya bateó en la jaula y corrió en el jardín derecho, aunque reconoce que apenas alcanza el 50 por ciento de velocidad.
Es un poco frustrante no poder estar ahí con mis compañeros, pero gracias a Dios estamos en primer lugar”, explicó el hermosillense, que viajará al complejo de West Palm Beach para fortalecer sus piernas en los próximos días.
El enigma que rodea su futuro inmediato es doble: no sólo se trata de si podrá jugar este mismo año, sino de dónde lo hará. La llegada de Carlos Correa cubrió su ausencia en la tercera base con éxito, y Paredes asume que, en caso de regresar, su destino podría ser el rol de bateador designado.
Veremos qué pasa cuando hablen conmigo y veamos en qué nueva posición voy a jugar”, dijo.
El rompecabezas de Houston incluye nombres pesados como Yordan Álvarez, José Altuve y Christian Walker, lo que hace difícil reacomodar piezas sin sacrificar defensa o bateo. La posibilidad de que Paredes o Walker entren en un paquete de negociaciones invernales tampoco está descartada.
El sonorense Isaac Paredes sabe que no controla los plazos, pero su sola presencia en el campo recuerda lo que su disciplina y porcentaje de embasado significan para la ofensiva texana. Junto a eso, se abre la posibilidad de que Paredes pueda estar con la Selección Mexicana en el próximo Clásico Mundial que se disputará en Houston.
Varios peloteros como Marcelo Mayer, Jonathan Aranda, entre otros, han sufrido lesiones que ponen en peligro su presencia en el Clásico del próximo año.