Maestros en las regiones Sierra Madre y Fronteriza de Chiapas han suspendido las clases debido a la creciente violencia e inseguridad en la zona. Profesores de municipios como Honduras de la Sierra, Siltepec, El Porvenir, Motozintla de Mendoza y Mazapa de Madero en la Sierra de Chiapas han declarado que no regresarán a trabajar hasta que se aseguren las condiciones de seguridad social. En una carta dirigida al gobernador Rutilio Escandón y a la titular de la Secretaría de Educación Pública estatal, Rosa Aidé Domínguez, miembros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) afirman la necesidad de protestar contra la grave situación de violencia en su región.
Además, el supervisor de la Zona Escolar 025 en la Sierra Madre de Chiapas, Celerino Nolasco Alvarado, ha anunciado la suspensión temporal de clases para proteger a docentes, alumnos y padres de familia. En su carta, él también acusa a las autoridades de negligencia y ausencia ante la inseguridad en la zona.
La Asamblea Estatal Democrática de la Sección 40 ha señalado que Chiapas se encuentra en una situación crítica y acusa complicidad entre autoridades y grupos criminales. Culpan al presidente López Obrador y al gobierno estatal de cualquier acto de violencia contra el pueblo. Cerca de 5 mil maestros han suspendido sus labores, afectando a alrededor de 150 mil alumnos de educación Preescolar, Primaria y Secundaria y Media Superior que se quedarán sin clases.
