Al vencer en el séptimo juego a Pacers; La quinteta de Oklahoma City venció por 103-91 a Pacers de Indiana, quienes sufrieron la pérdida de su jugador estrella Tyrese Haiburton; Sahi Gilgeous-Alexander repitió como MVP
Agencias
Una dolorosa lesión de su estrella mermó a los Pacers, y eso ayudó a que el Thunder de Oklahoma City tuviera el camino libre para proclamarse campeón de la NBA.
Y es que la lesión que sufrió en el primer cuarto el estelar Tyrese Haliburton derrumbó lentamente las ilusiones de los Pacers, quienes pudieron competir solamente en la primera mitad, pues en la segunda se cayeron y terminaron perdiendo como visitantes 103-91 en Oklahoma City.
El Thunder logró así llevarse 4-3 las Finales de la NBA, dándole a Oklahoma City su primer campeonato en esa ciudad, más no como franquicia, pues ellos nacieron en 1967-68 como Supersonics, que en Seattle lograron el título en 1979, se mudaron a OKC a partir de la 2008-09.
Shai Gilgeous-Alexander, acabó este domingo con 29 puntos, 12 asistencias y cinco faltas personales.
Tyrese Haliburton había comenzado con todo el duelo metiendo tres triples. Sumaba nueve tantos, y en una jugada, cuando restaban menos de cinco minutos por concluir el primer cierto, el guardia tomó el balón y cuando arrancaba rumbo a la pintura sufrió una lesión en el pie derecho que lo obligó a irse del juego.
En el Juego cinco se había lastimado, y sufrió una distensión en la pantorrilla derecha, que normalmente deja a un jugador fuera por unas semanas.
Tyrese decidió seguir jugando en la serie, y este domingo le cobró factura el físico. Salió llorando, lastimado y se prevé que hubiera roto el tendón de Aquiles. Esa baja le pegó a los Pacers.
Todavía lograron jugar como equipo, y aportando todos en el segundo cuarto, tanto que se fueron arriba por un punto, pero el tercero todo cambió.
El Thunder metió 34 por 20 puntos de los visitantes, y con eso se fueron con 13 puntos de ventaja al final del tercero. Igualmente, los tres mejores jugadores del Thunder jugaron a un gran nivel.
Gilgeous-Alexander (29), Jalen Williams (20) y Chet Holmgern (18) fueron claves en la remontada en la segunda mitad, donde llegaron a tener ventaja de 22 puntos en el cuarto periodo.
Pacers trató de reaccionar en los últimos minutos y logró acercarse a 10 puntos, pero era demasiado tarde, ya no alcanzó. Ningún jugador titular de Pacers pudo cargar con la ofensiva.
Bennedict Mathurin desde la banca fue el mejor, con 24 tantos, además de 13 tablas. Al final, el equipo que terminó con la mejor marca de la temporada regular, con 68 triunfos y solamente 14 derrotas, terminó coronándose.
Gilgeous Alexander el Jugador Más Valioso
Gilgeous Alexander, quien llegó a Oklahoma City en 2019 tras un año con los Clippers y como parte de un paquete en un canje que mandó a Paul George a Los Ángeles, logró lo que Kevin Durant, Russell Westbrook y James Harden no pudieron en 2012: darle el trofeo Larry O’Brien a su ciudad.
El canadiense ha dividido opiniones por su estilo de juego al llevar al límite el contacto físico en busca de los tiros libres, pero no se puede negar que el MVP de la temporada regular y de las finales de la NBA, se consagró como un héroe.