El pasado miércoles, elementos del Ejército Mexicano dispararon contra una camioneta que transportaba migrantes de diversas nacionalidades de manera ilegal en Chiapas, resultando en la muerte de seis personas y al menos nueve heridos. Los fallecidos fueron trasladados al Servicio Médico Forense, donde se confirmó que presentaban múltiples lesiones en la espalda, cabeza y extremidades, causadas por balas calibre 5.56×45 mm de fusiles reglamentarios FX-05.
El jueves se realizó la reconstrucción de los hechos en el Ejido Saltillo, en el municipio de Villa Comaltitlán, como parte de las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR). Los dos vehículos en los que viajaban los migrantes fueron llevados a los servicios periciales por los peritos de la Fiscalía de Distrito y la Fiscalía de Inmigrantes.
Según las autoridades, los migrantes cargaban mochilas, chamarras y bolsas plásticas con pertenencias mientras intentaban recorrer el trayecto de 220 km desde la frontera con Guatemala hacia los límites de Oaxaca, ruta que frecuentan para seguir su camino hacia el Istmo.
El incidente ocurrió cuando un presunto traficante de personas ignoró un retén del Ejército en la carretera costera entre los municipios de Villa Comaltitlán y Huixtla. Al no detenerse para la revisión, los soldados, pertenecientes a la 36 Zona Militar, lo persiguieron por varios kilómetros, asegurando haber escuchado detonaciones provenientes del vehículo. Durante la persecución, los soldados dispararon a la camioneta.
En un intento por escapar, el conductor ingresó a un camino de terracería, pero la alta velocidad y los disparos hicieron que el vehículo volcara, llevando a bordo a 33 migrantes. La FGR informó que entre los fallecidos había personas de Honduras, Perú, Egipto y El Salvador.
Los nueve heridos sufrieron lesiones por disparos y golpes a causa del accidente. Los militares solicitaron apoyo de los servicios de emergencia de los municipios cercanos, y los lesionados fueron trasladados a hospitales en Huixtla y Villa Comaltitlán en estado grave.
Las investigaciones continúan mientras se intenta esclarecer las circunstancias exactas del incidente.