La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, confirmó que no asistirá a la ceremonia de investidura de Nicolás Maduro, programada para el próximo 10 de enero de 2025, cuando el mandatario venezolano jurará nuevamente como presidente ante la Asamblea Nacional.
Sheinbaum aclaró que, en su representación, acudirá una delegación oficial o, en su defecto, el embajador de México en Venezuela, Leopoldo de Gyvés de la Cruz.
“Va a ir una representación”, explicó Sheinbaum en su conferencia matutina, respondiendo a las preguntas de los medios sobre si había recibido una invitación formal para asistir al acto protocolario.
Previamente, el 13 de diciembre, la mandataria mexicana había mencionado que, hasta esa fecha, su gobierno no había recibido ninguna invitación formal para la toma de protesta de Maduro.
Es importante recordar que Nicolás Maduro fue invitado a la ceremonia de toma de posesión de Sheinbaum, llevada a cabo el 1 de octubre de 2024. Sin embargo, el líder venezolano optó por no asistir y, en su lugar, envió un mensaje público felicitando a la presidenta mexicana.
“Felicito a este noble pueblo, a su presidenta electa Claudia Sheinbaum, al partido Morena, al PT y a los movimientos sociales”, expresó Maduro en su cuenta de X (anteriormente Twitter). Por su parte, Sheinbaum agradeció el gesto respondiendo: “Muchas gracias por la felicitación. Fue una gran jornada democrática y participativa de nuestro pueblo”.
En agosto de 2024, María Corina Machado, una de las principales figuras de la oposición venezolana, solicitó a Sheinbaum que interviniera para pedirle a Maduro que reconociera la victoria de Edmundo González Urrutia en las elecciones del 28 de julio.
“El actual gobierno de México (del presidente Andrés Manuel López Obrador) y el que ahora comienza (de Claudia Sheinbaum Pardo) tiene canales abiertos con Maduro y creo que es muy importante hacerle entender a Maduro que su mejor opción realmente es una transición negociada”, señaló Machado en una entrevista con Ciro Gómez Leyva.
Sin embargo, Sheinbaum evitó involucrarse en el asunto, argumentando que “para eso hay organismos internacionales”. Además, la mandataria consideró que la petición de Machado fue fruto de una “trampa” por parte del entrevistador.
El panorama diplomático entre México y Venezuela continúa siendo un tema de interés regional, especialmente ante los desafíos políticos y sociales que enfrenta el país sudamericano y la postura de neutralidad que ha mantenido el gobierno mexicano en el conflicto venezolano.
