El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este domingo que los aranceles recíprocos podrían aumentar para todos los países a partir del 2 de abril. En una entrevista con Fox News, explicó que la reciente prórroga de un mes para México y Canadá fue solo un respiro temporal destinado a las armadoras automotrices de su país, como parte de un periodo de transición.
En cuanto a la exención temporal para los automóviles producidos en México y Canadá, Trump dejó claro que se trataba de una única ocasión y que la decisión se tomó tras dialogar con ejecutivos de Ford, General Motors y Stellantis. “Es una transición hacia abril y después de eso, no voy a hacer esto. Les dije: ‘Miren, lo voy a hacer esta vez’”, afirmó.
El mandatario justificó la medida como un apoyo a los fabricantes de automóviles estadounidenses. “Sentí que era por el bien de los fabricantes de automóviles estadounidenses. Pensé que sería algo justo. Y por eso les di un pequeño respiro durante este corto periodo de tiempo”, agregó.
Por su parte, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, abordó el tema en su discurso desde el Zócalo de la Ciudad de México, asegurando que la relación comercial con Estados Unidos es sólida. Explicó que la política de aranceles recíprocos anunciada por Trump solo afecta a países que aplican tarifas a productos norteamericanos, lo que no es el caso de México.
Sheinbaum destacó la interdependencia entre ambas economías y expresó su confianza en que la cooperación bilateral continuará. Enfatizó que esta política no debería representar una amenaza para el comercio entre México y Estados Unidos, ya que no existen motivos para la imposición de tarifas recíprocas.