Señalan que hay presencia del crimen organizado en varias regiones y que en algunos ranchos ni los trabajadores quieren ir a laborar por la inseguridad
Redacción Entorno Informativo
Agremiados a la Unión Ganadera Regional de Sonora (UGRS) demandaron este lunes mayor seguridad para ellos, sus familias y trabajadores, luego del asesinato de uno de los ganaderos ocurrido la semana pasada en su rancho de Opodepe, a unos kilómetros del punto de revisión militar de Querobabi.
Durante un encuentro realizado a puerta cerrada, que se prolongó por más de dos horas, los rancheros expusieron al dirigente Juan Carlos Ochoa Valenzuela el riesgo que día a día enfrentan los productores pecuarios y sus trabajadores, lo que ha ocasionado, que algunos se queden sin mano de obra para producir.
En entrevista al término de la reunión, Ochoa Valenzuela reconoció que la inseguridad afecta al gremio y que varios de los agremiados manifestaron que han recibido amenazas y que muchos han optado de no acudir a sus propiedades por el riesgo que representa.
Asimismo, expuso que el sector está atemorizado luego del asesinato del ganadero Alejandro Morales, ocurrido el pasado 28 de agosto en su rancho cinegético, en la zona de Querobabi.
Indicó que se conformó una comisión de cuatro personas que se han visto afectadas gravemente en su situación, quienes junto a él se reunirán con el gobernador Alfonso Durazo para exponer la gravedad de la situación.
Planteó, que las autoridades federales y estatales, brinden un tratamiento diferente a los estados del norte, “porque toda la inseguridad del país viene para acá” debido a la cercanía con Estados Unidos.
Reconoció que en la mayoría de la entidad, existe presencia de las distintas fuerzas de seguridad, sin embargo, “no se ven acciones concretas”, manifestó.
Urgió a que regrese la paz al estado “que la gente tenga confianza de irse a todas horas a sus ranchos, que los trabajadores se sientan seguros, que las familias puedan ir al rancho como se iban antes, con confianza”.
