El hombre, identificado como José Manuel, de 32 años, tenía una herida en la cabeza al parecer provocada con arma de fuego
Gerardo López
Con una herida en sangrante en la nuca y tirado dentro de un inmueble abandonado, fue localizado el cadáver de un taxista, durante la mañana de ayer, en colonia Eusebio Kino.
El hallazgo sucedió alrededor de las 10:30 horas, en el cruce de avenida Mazatán y calle Domingo Olivares.
A esa hora, residentes del sector reportaron un sedán marca Nissan, línea Tsuru, color blanco, estacionado en el sitio, el cual dijeron, tenía varias horas en el lugar, y con las llaves en el encendido.
Agentes de la Policía Municipal atendieron la notificación realizada a la Línea de Emergencias 911 y al arribar cotejaron las características del automotor en la base de datos y se percataron que no contaba con reporte de robo.
Luego llamaron al propietario, quién dijo que el carro lo tenía rentado a un hombre, a quien identificó como José Manuel, apodado “El Gallo”, de 32 años, quien desde el pasado miércoles no le contestaba las llamadas.
Hallan al muerto
Tras dialogar con el dueño del automóvil, los agentes se introdujeron a una casa abandonada, frente a la cual estaba estacionado el medio de transporte.
En una de las habitaciones encontraron al hombre en el piso, vestido con camiseta tipo Polo en color rojo con rayas blancas y pantalón café y portando gorra azul, a quien a simple vista se le apreciaban manchas de sangre en la nuca debido a una herida al parecer provocada por arma de fuego.
Posteriormente llegaron paramédicos de Cruz Roja, que auscultaron al individuo e indicaron que no contaba con signos vitales, luego se acordonó el área y se pidió la presencia de personal del Departamento de Servicios Periciales de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora, para la realización del trabajo de criminalística de campo.
Un agente del Ministerio Público del Fuero Común especializado en homicidios, feminicidios y lesiones graves dolosas inició la integración de la carpeta de investigación y ordenó el traslado del cuerpo al Servicio Médico Forense, para la práctica de las pruebas periciales de ley
