Repunta presencia de personas sin hogar en las calles

Repunta presencia de personas sin hogar en las calles

Muchos recienten las altas temperaturas; Migrantes deportados o aspirantes a llegar a Estados Unidos, o personas que viven en el sur del país y fueron engañados por “enganchadores”, se quedan en el desamparo viviendo en las calles

 

Ivanova de los Reyes

Personas en situación de calle, como migrantes migrantes y personas que por su voluntad o por ser presas de las drogas, o en otros casos algunos que fueron engañados por enganchadores para traerlos con engaños a trabajar, no tienen un lugar donde vivir, siguen siendo la población más vulnerable ante las altas temperaturas que se registran en la ciudad.

Al no tener un hogar, familia o dinero para poder refugiarse en algún espacio o albergue, estas personas terminan durmiendo en las calles, en parques, debajo de los puentes, camellones donde hay sombra o por fuera de edificios, para protegerse de los rayos solares.

A medida que pasa el tiempo ha ido en aumento en número de personas que viven en las calles en la ciudad, quienes sufren de deshidratación y otros problemas de salud derivado de la falta de aseo, mala alimentación y las condiciones donde dormitan, que, sumado a las altas temperaturas, agravan su situación.

En los últimos meses se ha observado el repunte de hombres y mujeres, desde jóvenes hasta adultos mayores en esta condición, a quienes se les puede ver caminando o durmiendo en los parques, banquetas de edificios públicos o pidiendo comida o unas monedas en el Centro de la ciudad.

Las personas migrantes que fueron deportados del país vecino y que no pueden retornar a sus lugares de origen, también se les puede ver en los alrededores del primer cuadro de la ciudad lavando carros, y en las inmediaciones de las vías del tren, quienes han externado el difícil camino de adaptarse a temperaturas que no habían soportado en sus lugares de origen.

Mientras que personas foráneas o del sur del país, son vistos trabajando o pidiendo dinero en los principales cruceros de Hermosillo, con sus hijos a la espalda, expuestos al calor.

Share