En una casa de Celaya, Guanajuato, fueron encontrados los cuerpos sin vida de tres hombres y dos mujeres con signos de violencia, en lo que se registró como otra masacre en este municipio.
Desde que la Guardia Nacional asumió la vigilancia en la ciudad hace una semana, un total de 22 personas han sido asesinadas, según cifras de la Fiscalía del Estado.
El multihomicidio se reportó a las autoridades poco después del mediodía del martes, cuando se informó que dentro de una vivienda ubicada en la calle Mariano Jiménez, cerca de la esquina con Insurgentes, en el barrio de San Antonio, había varias personas sin vida.
Agentes de la Guardia Nacional, quienes vigilan la ciudad desde el pasado miércoles debido a la inspección de las armas de los policías municipales, se desplazaron rápidamente al lugar. Al ingresar al domicilio, confirmaron que se encontraban sin vida tres hombres y dos mujeres de aspecto joven, cuyos cuerpos no habían sido identificados hasta la tarde de ayer.
Las primeras versiones indicaron que el ataque pudo haber ocurrido durante la madrugada, y que los cuerpos fueron descubiertos por la mañana. Peritos de la Fiscalía levantaron las evidencias encontradas en la casa y comenzaron las investigaciones para esclarecer el asesinato.
El operativo de seguridad se extendió a las calles aledañas del barrio de San Antonio hasta la Alameda Hidalgo. Apenas un día antes, un comando asesinó a dos guardias de seguridad privada y a dos empleados en un ataque a una joyería en el centro de Celaya, a pocos metros de la Presidencia Municipal.
En otro hecho de violencia, la noche anterior, cuatro personas fueron asesinadas en Salvatierra mientras convivían afuera de un expendio de cerveza en la carretera que conecta con Celaya.
El secretario de Seguridad Ciudadana, Jesús Rivera Carranza, confirmó que la Secretaría de la Defensa Nacional estaba inspeccionando las armas de los policías, quienes no podían salir a patrullar. También afirmó que no se habían registrado hechos de alto impacto como la masacre en el centro de la ciudad, que coincidió con la vigilancia de la Guardia Nacional en la zona.
