En el municipio de San Francisco Ixhuatán, Oaxaca, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) interceptaron una aeronave tipo Cessna 210, en cuyo interior se encontraron más de media tonelada de cocaína. Según informes oficiales, los soldados aseguraron un total de 13 paquetes que pesaban alrededor de 40 kilogramos cada uno.
La operación fue posible gracias a la vigilancia constante del espacio aéreo mexicano, coordinada por el Centro Nacional de Vigilancia y Protección del Espacio Aéreo (Cenavi) y el intercambio de información a través de la Conferencia de Interoperabilidad Regional entre países de América Latina y el Caribe.
La aeronave fue detectada cuando se aproximaba a territorio mexicano, lo que activó la respuesta de tres aviones de ala fija y un helicóptero de la Fuerza Aérea Mexicana, que despegaron para interceptarla. Asimismo, un helicóptero de la Fuerza en Situación de Alerta (Fu.S.A.) transportó a una fuerza de reacción del Ejército, logrando ubicar la aeronave en tierra, a 16 kilómetros al suroeste de San Francisco Ixhuatán.
El cargamento asegurado fue entregado a las autoridades correspondientes, quienes realizarían las investigaciones y peritajes necesarios para confirmar la cantidad y tipo de droga incautada.
Las fuerzas armadas reafirmaron su compromiso de proteger a la ciudadanía, garantizando la seguridad y soberanía del espacio aéreo nacional, contribuyendo a mantener la paz y seguridad en el país.
